Compra un juego en GAME y se tira días esperando: "Ni se lo han dado al transportista"
La tienda de videojuegos GAME ha recibido recientemente una serie de quejas por parte de sus clientes debido a lo que muchos consideran publicidad engañosa en relación a los plazos de entrega de sus productos. Dos de los casos más destacados, ambos compartidos por los afectados en plataformas de opiniones, destacan un patrón preocupante de promesas incumplidas y falta de atención al cliente.
En uno de los casos, un cliente realizó un pedido el pasado 1 de octubre, confiando en que recibiría su producto en 24 horas, tal y como aseguraba la web de GAME. Sin embargo, para el 3 de octubre, no solo no había recibido el pedido, sino que, tras contactar con la empresa de reparto, descubrió que GAME ni siquiera había entregado el paquete al transportista. El cliente expresó su frustración, calificando esta situación como "competencia desleal" ya que eligió comprar en GAME debido a la promesa de entrega rápida que no se cumplió. Con un número de incidencia en mano, el comprador exigió una explicación a la empresa, sintiéndose claramente defraudado por el incumplimiento.
Otro caso similar, relacionado con la compra de una silla gamer como regalo, resalta un problema en los tiempos de entrega anunciados por la tienda. A pesar de que la página web de GAME aseguraba que el producto llegaría al día siguiente, el comprador no solo no recibió la silla en el plazo prometido, sino que también se enfrentó a una comunicación deficiente por parte de la tienda. Intentando contactar para obtener información sobre el estado de su pedido, el cliente recibió respuestas automatizadas y genéricas, que no abordaban sus preocupaciones reales. Finalmente, tuvo que recurrir a una solución de emergencia, buscando un plan alternativo para poder cumplir con su compromiso.
Estas quejas señalan un posible patrón de comportamiento en GAME, donde los plazos de entrega no solo no se cumplen, sino que además no se da una solución adecuada o directa a los afectados. El uso de publicidad engañosa en cuanto a los tiempos de entrega es una preocupación seria, ya que genera expectativas que no se corresponden con la realidad del servicio ofrecido.
Ambos clientes coincidieron en que, a partir de esta experiencia, no volverán a confiar en la tienda para futuras compras, calificando a GAME de poco profesional e incluso sugiriendo que estas prácticas rozan lo ilegal.
Ante la creciente desconfianza, es fundamental que GAME revise su estrategia de comunicación y mejore tanto la atención al cliente como la transparencia en los plazos de entrega para evitar una crisis de reputación que podría afectar seriamente su posición en el competitivo mercado de videojuegos y productos relacionados.