Lleva su coche siniestrado a un taller de Mapfre porque le daban un coche de sustitución y le dicen que no se lo darán hasta octubre
Un cliente insatisfecho de Mapfre enfrenta continuos obstáculos tras un siniestro vehicular ocurrido el 15 de julio de 2024, evidenciando problemas significativos en la gestión y comunicación de la aseguradora. El incidente, que involucró a un autobús de la empresa Tib que dañó el paragolpes del vehículo del asegurado, se complicó aún más por la ineficacia en el seguimiento del caso.
A pesar de reportar inmediatamente el accidente y elegir un taller que colabora con Mapfre por ofrecer un coche de sustitución, el cliente se encuentra en un limbo sin respuestas claras. Mapfre había asegurado que el perito visitaría el taller el 16 de julio, promesa que resultó ser falsa. Para el 18 de julio, la situación seguía sin resolverse, y las llamadas repetidas al servicio de atención al cliente de Mapfre no ofrecieron ninguna solución, solo más frustración.
El taller implicado también confirmó que la visita del perito no se realizó en la fecha acordada y aconsejó no confiar en las fechas proporcionadas por Mapfre. Además, se agregó a la confusión y al descontento del cliente la cuestión del coche de sustitución, el cual no estaba disponible hasta octubre y, contrariamente a lo que el cliente creía, no era responsabilidad de Mapfre sino del taller.
Este cliente, que ha estado con Mapfre durante años y tiene tres vehículos asegurados, solo había necesitado anteriormente el servicio de grúa, el cual describió como el único servicio cumplido por Mapfre. La experiencia ha dejado al cliente cuestionando el alto costo del seguro frente a la calidad del servicio recibido.
El intento de dejar una opinión en la web de Mapfre también resultó infructuoso, ya que después de solicitar sus datos, le pidieron que se comunicara por teléfono, lo que parece ser otra táctica dilatoria.
Este incidente plantea serias preguntas sobre la eficacia y la transparencia de Mapfre en la gestión de siniestros y la comunicación con los clientes, destacando la necesidad de una revisión significativa en sus protocolos de atención al cliente para restaurar la confianza y asegurar la satisfacción del cliente.