Le vende un iPhone y se le rompe al salir: "La gente piensa que si compras un móvil caro no tendrá fallos"
En pleno corazón de Barcelona, en el emblemático Paseo de Gracia, se encuentra una de las tiendas más representativas de Apple. Sin embargo, para muchos clientes, como lo muestra una reciente crítica publicada en Trustpilot, la experiencia de atención al cliente en este centro deja mucho que desear, especialmente cuando surgen problemas con sus productos de alta gama.
El pasado 30 de agosto de 2024, un cliente acudió a la tienda con un problema serio en su iPhone 14 Pro Max, adquirido un año y dos meses atrás. El dispositivo, que se negaba a encender, fue llevado al servicio técnico de Apple con la esperanza de obtener una solución rápida y eficiente. Después de un análisis exhaustivo, el técnico determinó que el fallo residía en la pantalla del dispositivo, una pieza crucial y costosa. Sin embargo, la sorpresa llegó cuando el empleado de Apple informó al cliente que la empresa no se haría cargo de la reparación, ya que el móvil no había sido comprado directamente en una tienda de Apple, sino en Carrefour.
El costo estimado para la reparación ascendía a la asombrosa cifra de 698 euros. La única alternativa que se ofreció al cliente fue que gestionara la reparación con Carrefour, el distribuidor original. Pero lo que más impactó al cliente no fue solo la negativa de Apple a cubrir el fallo bajo garantía, sino el comentario del técnico que, en un tono poco profesional, afirmó: "La gente se piensa que porque compra un móvil caro no va a tener fallos. Si fuera así, yo no tendría trabajo de técnico", e incluso comparó el caso con un Ferrari, sugiriendo que también los productos más lujosos pueden tener problemas.
Este comentario, lejos de tranquilizar al cliente, subrayó la sensación de descontento y frustración. No solo se encontró con una respuesta inesperada, sino que también percibió una falta de empatía por parte del técnico. A pesar de pedir un informe detallado sobre el fallo y el coste de la reparación, lo que finalmente recibió por correo electrónico no reflejaba ni el diagnóstico adecuado ni la estimación económica acordada en la tienda. La situación, según el cliente, le dejó con la sensación de haber sido estafado y de haber perdido el tiempo.
Este tipo de experiencias ponen en duda los valores que Apple ha promovido durante años, basados en la calidad del servicio al cliente y la fiabilidad de sus productos. La compañía, famosa por sus dispositivos de alta gama, parece estar fallando en mantener un nivel de atención acorde con los precios elevados de sus productos. Cuando un cliente invierte en un iPhone de más de mil euros, espera, al menos, un respaldo adecuado frente a posibles defectos técnicos. En este caso, la empresa no solo no asumió la responsabilidad, sino que dejó al cliente con una amarga experiencia.
Este tipo de incidentes resalta la importancia de que las grandes compañías tecnológicas no solo se enfoquen en el diseño y rendimiento de sus productos, sino también en la atención y el respeto hacia sus clientes. Cuando la confianza en una marca como Apple se ve comprometida por una atención al cliente deficiente, el prestigio que han construido durante años puede tambalearse rápidamente.
La crítica concluye con un mensaje claro: "Pésima la atención y los valores de la empresa por los suelos". Este testimonio refleja el malestar de muchos usuarios que, al igual que el autor de esta reseña, sienten que la marca de la manzana mordida no está cumpliendo con las expectativas que se asocian a sus productos de gama alta. ¿Es este un caso aislado o una señal de un problema mayor en el servicio técnico de Apple?
Solo el tiempo y las respuestas de la empresa determinarán si estos problemas son afrontados con seriedad o si continuarán erosionando la confianza de sus clientes más leales. Mientras tanto, los consumidores deberán estar más atentos que nunca antes de invertir en dispositivos de esta marca, que promete mucho, pero a veces, entrega menos de lo esperado.