Si tienes un Peugeot, un Opel o un Citröen con este motor, puedes reclamar así que te devuelvan el dinero

Citroen Puretech

La demanda colectiva contra Peugeot, Opel y Citröen (en definitiva, el Grupo Stellantis) por problemas en los motores Puretech, esos con correa bañada en aceite, sigue creciendo, con más de 6.000 personas involucradas hasta el momento. Los afectados han alzado la voz debido a fallos graves en los motores Puretech, en los que la correa de distribución se contamina con aceite, deteriorándose y causando daños severos, como la rotura del motor. Ya hay abogado, ya están en conversaciones para ver si les cambian el coche o les devuelven el dinero pagado por estos modelos defectuosos.

Lo cierto es que sumarse a esta demanda colectiva es bastante sencillo. Basta con mandar un correo electrónico a afectadoscorreapsa@gmail.com o info@afectadoscorreapsa.com. También se puede entrar a través de la web https://afectadoscorreapsa.com/ donde te explican todo con todo lujo de detalle. ¿Los requisitos? Simplemente basta con tener un Opel, un Peugeot o un Citröen con el motor Puretech.

Muchos usuarios denuncian que, a pesar de los múltiples informes y quejas sobre este problema, Peugeot no ha lanzado una campaña oficial para abordar la situación. Además, el problema no se limita solo a Peugeot, sino que también afecta a otras marcas como Opel y Citröen, que utilizan los mismos motores en sus vehículos, enfrentando complicaciones similares.

Uno de los principales inconvenientes que enfrentan los propietarios es el alto costo de la reparación, que en muchos casos implica la sustitución completa del motor. A pesar de esto, Peugeot sigue argumentando que no hay un defecto generalizado y afirma que las averías podrían estar relacionadas con un mal uso o un mantenimiento inadecuado del vehículo.

A través de un comunicado oficial, Peugeot ha señalado: "Evaluamos cada reclamación de forma individual. No podemos analizar una reclamación colectiva, ya que cada caso debe examinarse particularmente. El volumen de ventas no refleja un defecto general. Continuaremos evaluando las reclamaciones relacionadas según nuestros criterios y la normativa vigente".

A pesar de esta postura, los afectados insisten en que el problema es generalizado, y la demanda sigue sumando participantes. La situación plantea preguntas sobre la responsabilidad de las marcas en la fabricación de vehículos y la atención que brindan a sus clientes cuando surgen fallos en serie como estos.