La OCU te dice cuáles son las mejores galletas que puedes comprar en el súper
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un exhaustivo estudio para identificar las mejores galletas disponibles en los supermercados, analizando meticulosamente sus componentes nutricionales. Contrario a lo esperado, marcas populares como Cuétara y Gullón no figuran entre las seleccionadas.
El estudio de la OCU se centró en evaluar la calidad nutricional de las galletas, prestando especial atención a la proporción de cereales integrales, los niveles de azúcar, grasas saturadas y la presencia de aditivos. De entre las 286 variedades analizadas, las galletas de avena sin gluten de Santiveri destacaron por encima del resto, ofreciendo un equilibrio ideal entre sabor y valor nutricional. Estas galletas contienen ingredientes como copos de avena sin gluten, almidón de maíz, aceites vegetales de girasol y oliva, harina de arroz, inulina, fibra de maíz, arroz crujiente y proteína de guisante, complementados con fibra de cítricos, aromas naturales, lecitinas, bicarbonato amónico, sal y antioxidantes como el extracto rico en tocoferoles.
La OCU resalta que las mejores opciones son aquellas hechas con cereales integrales y con un bajo contenido en azúcares, grasas saturadas y aditivos. Las galletas de avena de Santiveri, disponibles en El Corte Inglés a 2,90 euros el paquete de 190 gramos, son un ejemplo excelente de cómo una elección consciente puede ofrecer tanto salud como placer.
La guía del consumidor de la OCU sugiere prestar atención a varios criterios al seleccionar galletas:
- Preferir cereales y harinas integrales para una mayor calidad nutricional.
- El contenido de azúcar no debe exceder el 17% del total de las galletas.
- Las grasas saturadas deberían mantenerse por debajo del 5% del total.
- En caso de que contengan chocolate, verificar que esté hecho con manteca de cacao y cacao desgrasado.
- La cantidad de sal no debe superar el 1% del contenido total.
Además, es crucial evitar ingredientes ultra procesados y aditivos innecesarios que no aportan valor nutricional y pueden afectar negativamente la calidad del producto. Con estas pautas, los consumidores pueden hacer elecciones más informadas y disfrutar de un consumo responsable sin sacrificar el sabor.
