Las ensaladas envasadas son calóricas, pero algunas merecen la pena

Las ensaladas han ganado popularidad en la rutina diaria de los españoles, especialmente como opción para la cena. Su facilidad de preparación y la tendencia a optar por platos más ligeros y rápidos al final del día hacen que sean una opción recurrente. Este deseo de comodidad por parte de los consumidores se ve reflejado en el creciente número de ensaladas listas para consumir en los supermercados.

La lechuga o sus variedades mixtas suelen ser el ingrediente base de la mayoría de estas ensaladas, pero no el único. Muchos de estos productos incluyen otros componentes como atún, pollo, pasta o diferentes aderezos que aportan variedad y sabor. Sin embargo, estas diferencias también afectan a su valor nutricional, tal y como ha analizado la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Solo cuatro ensaladas logran la máxima puntuación de Nutriscore

La OCU ha analizado 22 ensaladas envasadas y encontró que solo cuatro de ellas obtienen una «A» en el sistema Nutriscore, la máxima calificación. Nutriscore es una herramienta que evalúa los aspectos nutricionales de los alimentos, considerando los aportes beneficiosos como frutas, verduras, fibra y proteínas, y valorando negativamente la presencia de calorías, grasas saturadas, azúcares y sal. Las ensaladas que lograron la mejor puntuación son Auchán César (9,20 €/kg), Hacendado Ensatún (9,70 €/kg), Aldi Mare Nostrum (15,60 €/kg) y Primaflor Caprese con atún (16,80 €/kg).

El resto de las ensaladas analizadas tienen puntuaciones variadas: diez de ellas fueron clasificadas como «B», siete como «C» y una en particular, Edulis César con pollo y queso de Lidl, recibió una «D», que es la segunda peor calificación del sistema Nutriscore, solo superada por la «E». El tipo de aliño y la calidad y cantidad de ingredientes como el atún, pollo, pasta o queso, juegan un papel importante en la valoración final.

Valor nutricional y calorías

Además, la OCU subraya que estas ensaladas raramente alcanzan las 700 Kcal recomendadas para una comida completa. Esto sugiere que, si se eligen como plato principal, deben complementarse con otros alimentos, especialmente aquellos que aporten proteínas. Las calorías por ración varían según el tipo de ensalada: las de pasta tienen un promedio de 588 Kcal, las de pollo (como la César) 410 Kcal, las de atún 331 Kcal, y las de queso unas 263 Kcal.

Precio y valor nutricional

Otro aspecto a tener en cuenta es el precio. Las diferencias de costo son considerables, y no siempre se justifican por la calidad de los ingredientes. Por ejemplo, la ensalada más cara del análisis, la Diquesí Lorena con queso de cabra (19,90 €/kg), cuesta más de tres veces el precio de la ensalada más económica, la Edulis Pasta de Lidl (6,20 €/kg). Aunque algunas variaciones de precio pueden explicarse por el tipo de ingredientes (la pasta suele ser más barata que el queso), esto no siempre significa una mejor calidad del producto final.

En este sentido, preparar una ensalada en casa no solo puede ser más económico, sino que también ayuda a reducir el impacto medioambiental de los envases plásticos, que suponen entre el 10% y el 15% del peso total del producto.

Nutriscore y su posible implementación en España

La OCU considera que, si Nutriscore estuviera integrado de forma obligatoria en el etiquetado de los productos, como ya ocurre en otros países europeos, los consumidores podrían hacer evaluaciones más informadas y rápidas sobre la calidad nutricional de los alimentos. Este sistema se basa en un semáforo de colores (con cinco letras y colores) que facilita la elección de productos más saludables dentro de su categoría.

Es por ello que la OCU hace un llamado al Ministerio de Consumo para que mantenga su compromiso de implementar Nutriscore en España, impulsando así una alimentación más saludable y consciente para los consumidores.

En conclusión, aunque las ensaladas preparadas ofrecen una alternativa cómoda y rápida, es importante prestar atención a su valor nutricional y a los precios. Además, tener herramientas como Nutriscore permitiría a los consumidores tomar decisiones más informadas a la hora de elegir sus alimentos, promoviendo hábitos de consumo más saludables.