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Un cliente «caza» a MediaMarkt subiendo un precio para exagerar después una rebaja

Un incidente reciente ha suscitado críticas hacia una conocida tienda de electrónica por sus tácticas de marketing, consideradas engañosas por los consumidores. Una pareja adquirió una televisión LG de 32 pulgadas, atraída por un aparente descuento significativo. El producto, originalmente marcado con un precio de 329 euros, estaba rebajado a 255 euros, lo que representaba una oferta tentadora. Sin embargo, al concluir la oferta, el precio de la televisión se ajustó a 269 euros, revelando que el precio sin rebaja había sido inflado para hacer que el descuento pareciera más atractivo de lo que realmente era.

Este cambio en la etiqueta de precios ha provocado la indignación de los clientes, quienes acusan a la tienda de manipular los precios para crear una percepción de ahorro que no corresponde con la realidad. Los consumidores afectados expresaron su frustración al notar que el descuento real no alcanzaba siquiera el 7%, una diferencia considerablemente menor a la sugerida por la promoción inicial.

La falta de transparencia en la política de precios ha sido calificada por los afectados como una táctica poco ética y de baja categoría, criticando a la empresa por intentar engañar a sus clientes de tal manera. Este tipo de prácticas no solo afecta la confianza del consumidor sino que también plantea cuestiones sobre la regulación de las estrategias publicitarias en el sector retail.

El incidente ha resonado en las redes sociales y plataformas de opinión como Trustpilot, donde los consumidores han expresado su decepción y descontento. Este caso se suma a la creciente lista de quejas sobre prácticas comerciales cuestionables, destacando la necesidad de una mayor vigilancia y regulación para proteger los derechos del consumidor.