Compra dos tumbonas en El Corte Inglés, le vienen rotas y le cobran 70 euros por llevárselas
Frustración creciente con el servicio de atención al cliente tras la compra de tumbonas de jardín defectuosas. Un cliente ha experimentado múltiples inconvenientes tras adquirir dos tumbonas de jardín a través de una conocida plataforma de comercio electrónico. Al recibir su pedido, ha descubierto que una de las tumbonas venía con una mancha negra considerable y la otra estaba rota en varios sitios.
Ante este desafortunado escenario, el comprador ha acudido inmediatamente al centro más cercano con fotografías de los productos defectuosos para formalizar su reclamación. Sin embargo, la experiencia en tienda no ha mejorado la situación; por el contrario, ha involucrado una serie de derivaciones entre departamentos que no han resuelto nada.
Tras una espera de 10 días, el servicio de recogida finalmente ha llegado para llevarse las tumbonas, pero no sin antes añadir más confusión al proceso. Contrario a lo esperado, el documento dejado por la empresa de transporte indica que sólo se recogió una tumbona, y además, se ha cobrado al cliente 70€ por el transporte, un aumento significativo respecto a los 30€ iniciales.
La falta de una respuesta eficaz y el continuo juego de pasar la responsabilidad de un departamento a otro ha exacerbado la frustración del cliente, quien califica el servicio recibido como caótico y la atención al cliente como desastrosa. La experiencia ha llevado al consumidor a advertir a otros sobre la ineficacia del servicio de compra en línea de la compañía, expresando una impotencia total frente a la situación.