Quieren cambios en ese Plan Moves que nunca llega cuando compras un coche
Los fabricantes de automóviles han encontrado un aliado inesperado en la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), tradicionalmente crítica con la industria automotriz y promotora de demandas colectivas contra numerosas marcas por prácticas como el 'cártel de los coches'. En un cambio de postura, la OCU ahora respalda a los fabricantes y solicita al Gobierno que acelere la implementación de las ayudas del Plan Moves III.
Este plan tiene como objetivo facilitar la adquisición de vehículos eléctricos e híbridos enchufables mediante subvenciones que, según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), deberían entregarse directamente en los concesionarios al momento de la compra para fomentar la transición hacia opciones de transporte menos contaminantes.
Tras más de un año desde su anuncio, la OCU se ha sumado a la petición de los fabricantes, destacando la necesidad de automatizar estas ayudas con la entrada en vigor de las nuevas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Según una encuesta realizada por la OCU, la activación de estas zonas en ciudades españolas de más de 50.000 habitantes ha obligado a muchos ciudadanos a modificar sus hábitos de movilidad y, en algunos casos, a cambiar de vehículo.
El proceso para recibir las ayudas del Plan Moves III, que puede llegar a tardar un año, incluye una demora de seis meses para la aprobación autonómica, más el tiempo necesario para presentar la documentación y recibir el importe final. Esto, según la OCU, está desincentivando la compra de vehículos menos contaminantes y provocando que algunas marcas como Fiat, Renault y MG, comiencen a adelantar las ayudas a sus clientes.
La OCU urge al Gobierno a simplificar y agilizar la concesión de estas ayudas, sugiriendo un sistema inmediato similar al utilizado en el anterior Plan Pive. Cita ejemplos de otros países, como Italia o Austria, donde las ayudas se descuentan directamente del IVA, proporcionando un alivio financiero instantáneo para los compradores. Este enfoque no solo simplificaría el proceso, sino que también reforzaría el compromiso de España con la movilidad sostenible.