Las casas se caen a trozos, pero el Plan VIVE de Alcorcón recibe un premio al "Mejor Proyecto Inmobiliario"
El Plan Vive de la Comunidad de Madrid, una iniciativa impulsada por el gobierno regional para ofrecer viviendas de alquiler asequible mediante un modelo de colaboración público-privada, ha recibido recientemente el galardón al Mejor Proyecto o Desarrollo Inmobiliario de 2024 en un acto celebrado en Barcelona. Sin embargo, este reconocimiento llega en un momento de creciente malestar por parte de los residentes de las viviendas de este plan en Alcorcón, quienes denuncian graves problemas estructurales que, según ellos, ponen en duda la calidad y seguridad de estas construcciones.
Premios versus realidad: ¿calidad premiada o problemas estructurales?
El reconocimiento otorgado a la Comunidad de Madrid ha sorprendido a muchos, considerando las denuncias de los vecinos de Alcorcón, quienes desde hace meses alertan sobre las grietas visibles en paredes, muros derrumbados e, incluso, filtraciones de agua en los pasillos de las viviendas entregadas en marzo. Este galardón, que destaca el modelo de gestión del Plan Vive como un “proyecto innovador y exitoso,” contrasta notablemente con la experiencia de los inquilinos que actualmente lidian con los desperfectos en sus hogares.
El Grupo Municipal de Más Madrid en Alcorcón ha compartido en redes sociales imágenes de las deficiencias de las viviendas, describiendo “desniveles, grietas, muros desprendidos y ahora también inundaciones”. Desde la formación denuncian que estos problemas estructurales no son casos aislados y que llevan tiempo alertando de la falta de calidad en los materiales empleados. Esta situación ha generado un profundo malestar, pues el Plan Vive fue anunciado como una solución habitacional de calidad y asequible.
La respuesta oficial: explicaciones que no convencen
La Comunidad de Madrid ha tratado de minimizar los problemas, atribuyendo las filtraciones a una “avería puntual” en una tubería de agua caliente y afirmando que los desperfectos causados por el agua han sido reparados. No obstante, las autoridades locales y los residentes consideran que estas explicaciones son insuficientes, ya que los problemas van más allá de una sola avería y afectan de manera general la estructura de las viviendas.
La alcaldesa de Alcorcón, Candelaria Testa (PSOE), se ha unido a las quejas de los vecinos en redes sociales, denunciando la baja calidad de las viviendas entregadas. “Ni por debajo del mercado ni de la calidad que deberían. Los inquilinos e inquilinas merecen condiciones dignas”, expresó en un mensaje, subrayando la necesidad de una solución estructural que garantice la habitabilidad y seguridad de los inmuebles.
En contraste, el Partido Popular de Alcorcón ha criticado a la alcaldesa, acusándola de difundir “bulos” para desacreditar el proyecto, mientras insisten en que los problemas señalados no reflejan la realidad del Plan Vive. Sin embargo, la evidencia de grietas, muros derribados y filtraciones cuestiona las afirmaciones de la Comunidad sobre la calidad del proyecto.
Un premio polémico y una urgente necesidad de revisión
El galardón al Plan Vive ha sido recibido con escepticismo por quienes consideran que el premio ignora los problemas estructurales y la experiencia real de los residentes de estas viviendas. Los vecinos y los partidos de oposición exigen una revisión a fondo de las construcciones para verificar su seguridad y calidad, algo que consideran incompatible con los problemas reportados.
Con la creciente necesidad de vivienda asequible en Madrid, el Plan Vive sigue siendo una iniciativa clave, pero los problemas denunciados ponen en duda el verdadero compromiso de las autoridades con la calidad y seguridad de las viviendas. Para muchos, el premio representa una distorsión de la realidad, priorizando la apariencia y el modelo de negocio sobre la experiencia y el bienestar de los inquilinos. En un contexto donde se exigen viviendas dignas, la calidad debe ser el principal criterio a valorar antes de otorgar cualquier reconocimiento.
